Las wallets son el monedero digital donde podemos almacenar nuestras criptos y poder conectarnos a la web 3.0 y la red Blockchain de forma descentralizada para realizar cualquier tipo de operación.
Las wallets están protegidas con una serie de claves, y estas se dividen entre claves públicas y privadas.
Clave pública:
La clave pública es como un número de cuenta con la que podemos realizar transferencias con cualquier otra wallet, sin el riesgo de que puedan extraer nuestros fondos.
A través de la clave pública se generan direcciones para recibir, consultar y ver el estado de nuestros fondos.
Clave privada:
La clave privada es la que usamos para proteger nuestros fondos, ya que esta es la que nos da acceso a los mismos y la que debemos cuidar por completo.
Tipos de wallets de criptomonedas:
Existen diferentes tipos de wallets pero las podemos dividir en dos grandes categorías:
- Hot wallet: Son monederos online, los cuales pueden ser aplicaciones o incluso se pueden instalar como extensiones al navegador como por ejemplo MetaMask.
- Cold wallet: Son monederos físicos los cuales funcionan sin conexión a internet, lo cual lo vuelve la opción más segura de wallet.
Encontramos diferentes subcategorías de wallets dentro de estas dos:.
Hot Wallets:
Wallet hospedados:
Estas wallets son las que poseemos en un exchange de criptomonedas y están alojados de forma directa en el ahí. La cuestión es que es la propia plataforma de intercambio la que custodia tus criptomonedas, por lo que no hay independencia real entre la Wallet y el Exchange.
Wallet Online:
Estas Wallet son independientes a los Exchanges y tenemos el control total. Estás están conectadas 100% a internet y otra característica extra de seguridad con la cuál se utiliza una tecnología que impide que puedan rastrear tu IP.
Cold Wallets:
Wallet Física / Hardware:
Las wallets físicas o de hardware y para usarla deberás meter un código PIN en la Wallet el cual no se almacena digitalmente en ningún lado.
Este tipo de wallet es probablemente el más seguro, pero también el más caro. Aunque no es tan versátil como una wallet online, podrás también llevarlo contigo ya que son dispositivos de pequeño tamaño.
Paper Wallet:
Un documento físico que tiene tanto las claves, como la dirección para el envío y la recepción de fondos.
Hay que guardar ese papel de la mejor forma posible y no pueden usarse para el intercambio ya que solo son útiles para la gestión de cripto activos.
Cómo elegir el mejor tipo de wallet para mí
Primero debemos plantearnos para qué la queremos, estas son unas cuestiones a considerar:
- Qué cantidad de dinero vas a invertir en criptomonedas.
- Cantidad de transacciones que vas a hacer, es decir, cuánto vas a utilizar para comprar o vender.
- Si te interesa operar en un corto, medio o largo plazo.
- Si tu intención es almacenar criptomonedas o intercambiarlas.
Ya que tenemos todo esto en cuenta podremos decidir cuál es la wallet que mejor se ajusta a nosotros y al tipo de inversor que somos al momento, incluso podemos llegar a tener más de una.
Conclusión:
Las wallets siempre nos acompañarán en nuestro caminar en el mundo cripto, por lo que seguramente tendremos más de una en algún punto ya que las cosas que estaremos haciendo serán cada vez más avanzadas y al final ahí tendremos nuestros portafolios.